Tres años hace ya del asombro (no tanto) que causo la invasión rusa en territorio ucraniano, al menos así fue para los europeos de a pie los que vivimos el día a día como una rutina guiada y delegada en manos supuestamente preparadas para ello. Son tres años de muerte y dolor para unos y otros, inmersos en una carnicería dirigida desde despachos.
Históricamente Europa se decía llegar algo más allá de Danubio, detrás tierras más o menos bárbaras pertenecientes a un inmenso territorio zarista, etnias varias, religiones similares, dominio siempre opresor llegando a situaciones como la Holodomor de Stalin contra Ucrania, granero de la URRSS, que se permitió oponerse a las normas del zar rojo.
Con los años y la historia a cuestas en este continente se aglutinaron dos mundos diferentes, Europa y Rusia, sin más, y tras la segunda gran guerra la diferenciación fue en aumento y los altibajos políticos definitivos.
Es este siglo XXI, tan corto aún pero tan convulso, el que nos va a replantear una realidad dura pero cierta: Europa ya no es nada.
En realidad, de la postguerra de 1939 a 1945, fue y ha sido un paso del belicismo a las maniobras económicas y políticas de los dos bandos triunfadores (Francia e Inglaterra siempre han querido ser mas de lo que realmente representan). Guerra fría, telón de acero, glasnots,la crisis de los misiles… altibajos de ambos gigantes, plagados de periodos intervencionistas a nivel internacional para demostrar poderío; mientras Europa plácidamente soñaba con políticas fortalecedoras económicamente, se entregaba al “gran invento” de la globalización y mantenía su cruzadismo histórico en terrenos no propios, medio oriente y norte de África siempre considerados manipulables cuando no lo eran. Europa siempre se ha considerado el ombligo del mundo y la civilización.
Aquí un brevísimo resumen de un camino que nos ha llevado al presente defraudador.
Cuando Ucrania, que realmente nunca tuvo sueños occidentalistas, es atacada por los deseos imperialistas de Putin, Europa se iza en protector de los derechos democráticos del país, ¿quien puede dudar de sus intereses más allá que ideológicos, olvidamos que la UE se inicio como un club económico?
En la Constitución Europea muchos hemos denunciado precisamente el protagonismo del interés económico al humano, ahí el desarrollo armamentístico, por ejemplo, su fabricación y venta son una buena base de ingresos, pero necesita clientes y a un buen comercial (en lo que muchas veces se han ido convirtiendo los políticos de turno) no hay quien se le resista ya sea en Siria, Gaza, Congo, Eritrea o el fin del mundo.
El gran guardián de las esencias democráticas USA, no podía quedar al margen, y pese a su situación convulsa interior, el protagonismo por el que se ha regido y sigue rigiéndose a nivel internacional, marcó la marcha de la guerra ucraniana. ¿Valedor de las esencias democráticas, salvador de occidente y su cultura?
Tres años, muchos cambios para Tío Sam y un final ni feliz ni duradero, con un fondo desgraciadamente repetido en tantos y tantos apaños internacionales.
La guerra “protectora” de los intereses ucranianos, puede terminar de hoy a mañana, posiblemente a estas horas este en su punto final. Rusia inicia un expansionismo tremendamente peligroso para los estados vecinos que una vez fueron su dominio, las organizaciones europeas y la OTAN demuestran su falta de protagonismo, su “guiñolismo” americano, una paz forzada con la que no está de acuerdo pero que asume y , llegamos al punto altruista de todo esto: un país entero por reconstruir (uno más, Gaza y Siria también); el cliente que necesitaba misiles, a partir de ya, necesita ladrillos y maquinaria de reconstrucción a cambio de las entrañas de su propio territorio que pasan a ser minas USA. Son ladrillos muy especiales, fabricados y cocidos a fuego lento, son LADRILLOS DE SANGRE.
La reconstrucción de un país sobre su propia sangre y humillación no es firme, nunca puede serlo (recordemos aquel armisticio de 1918).
Y con todo, ¿en qué queda Europa, su cultura, sus valores democráticos, sus intereses de futuro? todo se va diluyendo en lo que serán, si no se remedia, simples paginas de su historia. El mundo va lanzado a la dualidad del poder. El desarrollo de la IA en aumento, el pensamiento libre, la crítica, la valoración del ser humano sobre todo lo demás, se queda a disposición de quien más tiene y más puede, dos gigantes económicos sin más, ¿o no? Quizás un solo bloque deshumanizado en manos de personajes que en otros tiempos habrían sido considerados orates inventores de un mundo irreal que ya no lo es.
¿Adiós Europa?